El email es una de las mejores formas de comunicación que tienes con tus clientes.
O que puedes tener si aún no lo has probado.
Yo te lo aconsejo.
Déjame que te lo justifique en este artículo.
Índice
1.- Enviar un email diario, ¿es necesario?
2.-El email diario y por qué no molesta
Los email de tu vida no interesan a (casi) nadie
Cada email tiene que aportar algo al lector
3.- Las #5 ventajas, aquí las tienes
#1-Conseguir la confianza de tu suscriptor
#2-Muestras a diario lo que haces
#3-Consigues mucha información, preguntando
#4-Puede que ahora no, pero consigues clientes a largo plazo
#5-Los lectores se acostumbran a ti
4.-Consejos para disfrutar de esas ventajas (y de alguna más)
1.- Enviar un email diario, ¿es necesario?
Si, y si no es cada día, sí lo es de una manera frecuente, piensa que querer acercarte a alguien de Pascuas a Ramos no sirve de mucho.
Es superimportante estar en la mente de la gente en el momento adecuado, ese en el que se dispone a comprar, a decidir.
Hoy las posibilidades de que una persona se acuerde de ti una vez que ha comprado son mínimas.
Ese recuerdo le dura unos pocos días, por lo alto, a no ser que el proceso le haya llamado la atención, que le haya resultado, por el motivo que sea, muy atractivo, fácil o interesante.
O que le caigas bien.
O que el producto que le ofreces consigue cubrir todas las necesidades que busca y no puede, ni quiere, cambiar de proveedor.
Aunque, por experiencia, te digo, que esto se mantiene hasta que aparece otro que le llama más la atención, o que se lo recomienda alguien.
Cuando una persona te compra, el paso es enorme, has conseguido que se decida por ti.
Se ha dado cuenta de que necesitaba “algo”.
Lo ha buscado.
De entre montones de ese “algo”, ha elegido uno y eres tú.
Ya ha llegado a ti, uno de tantos.
Y, por último, ha clicado.
Que en ese (muy) largo proceso esa persona se vaya por un camino distinto es tan fácil que si ha llegado hasta ti, deberías intentar que no te olvide.
Crear un vínculo, una relación, convertirte en alguien en quien puede confiar.
La (mejor, sin duda) forma de hacerlo es con el email marketing.
Yo, soy fan, me parece un sistema de venta brutal.
Un email entra en tu vida de una manera apenas agresiva, en el momento que tú decides, mientras, puede estar esperando en tu bandeja de entrada, calladito, el tiempo que necesites hasta sacar un rato y leerlo.
Puedes usarlo para campañas de marketing muy variadas, se adapta a cualquier estrategia que necesites.
Solo es necesario tener un formulario en tu web donde se suscriban tus clientes y así empiezan a formar una lista a la que vas a enviarlo.
Nunca con tu cuenta personal ni con una de Gmail, por ejemplo, que queda feo.
No se hace así.
Tienes que contar con una herramienta de email marketing para envíos masivos, asociada a tu cuenta corporativa.
Estos gestores de envío, tienen, como casi todo, planes gratuitos y de pago.
El paso de uno a otro lo determina el número de usuarios suscritos, pero hay algunas que tienes una cantidad muy elevada, no es necesario que, de primeras, empieces a pagar, e incluso, según tu tipo de negocio o el servicio que realices, puede que no necesites dar ese paso nunca.
Así, ya ves, es bueno, sencillo y barato.
Lo tiene todo.
Vamos ya al tema que nos ocupa, el caso concreto del envío de un email diario.
2.- El email diario y por qué no molesta
Es (sin lugar a dudas) la mejor forma de crear una relación que se puede acercar a la amistad, si juegas bien tus cartas.
En este tipo de email, en todos y en cada uno de los envíos, (aunque hay diferentes opiniones por ahí), tienes que aprovechar para vender u ofrecer tus servicios.
No pierdas una sola oportunidad de hacerlo.
Con un enlace para que la persona haga lo que quieras, o vaya a dónde tú quieras, que actúe.
No, no molesta, en serio.
No es invasivo, no pienses que vas a agobiar al lector por tener cada día un mensaje tuyo.
En cualquier momento puede decidir salir.
Si sigue es porque no le importa.
Le gusta, de hecho.
Hay varias reglas, que merece la pena cumplir, pero, como todas, están para romperse y, cuando ya tienes la relación un poco cimentada, el hacerlo no te va a llevar a nada malo.
Pero antes de iniciar algo muy novedoso, tienes que crear en tu usuario un interés por ti, y se consigue con la frecuencia de envíos.
Un email, un objetivo
No embarulles a quién te lee.
No empieces a ofrecer montones de cosas a la vez, a mostrar novedades, a hacerle distintas propuestas, todas en un mismo envío.
Es raro que le interese todo, y en ese momento, lo único que vas a conseguir es aturdir al lector, que se agobie y se vaya.
Si tienes una promoción, promocionarla, pero solo haz eso.
Si es una campaña de venta de algo, lo mismo, vende, pero solo eso.
Si tienes varios servicios, dedica cada email a uno de ellos, no los muestres todos, para eso está tu web, donde podrán verlos con detenimiento.
Coloca siempre un enlace a tu web, ahí pueden ver más productos o servicios, si lo necesitan.
Cada email, un propósito, recuérdalo.
Los email de tu vida no interesan a (casi) nadie
Sin ofender.
Bueno, igual a ti sí, pero incluso a tu gente cercana les pueden resultar cansinos.
A ver, recuerda cuántos se apuntan a ver tus fotos de boda o de vacaciones o del cumple de tu hijo, nadie, 2 o 3 quizás.
En ese margen me muevo.
Otra cosa es que uses un episodio o un momento de tu vida y con él cuentes una historia que entretenga,
Es muy distinto que digas.
“Esta mañana me he levantado y he ido al supermercado nuevo que han puesto en mi calle”
A que cuentes:
“Esta mañana, después de mucho luchar con la pereza, he salido de casa.
Por supervivencia, ni fruta tenía.
Me acordé que han puesto un nuevo súper aquí al lado.
Eso me animó.
Me gustan los supermercados, no sé muy bien por qué, pero me atraen.
Recuerdo un viaje que hice a Alaska, un trekking, y parábamos en las ciudades a comprar provisiones.
Me encantaba, de verdad, eran impresionantes, enormes, había de todo.
…
…
…”
¿Ves la diferencia?
El hecho es el mismo, yo, que me levanto y voy al súper.
Pero el cómo lo haces cambia de manera brutal.
Enlazo mi interés por los supermercados con la experiencia en un viaje que, ya por ser a Alaska, llama la atención.
(Es un caso real, fue un viaje muy chulo del que hablo en mi newsletter)
De eso se trata, de saber dar interés a algo que, a simple vista, no lo tiene.
El arte de contar historias.
Por ahí, los más listos que yo, que son unos cuantos, lo llaman storytelling.
Cada email tiene que aportar algo al lector
Me refiero a que hables de algo que interese a tu lista, que le entretenga o que le aporte alguna enseñanza.
Tampoco es que des una información tan llena de datos, que el lector se imagine preparando un examen, pero siempre aporta algo, da contenido del sector, relaciona la historia anterior con cualquier cosa que tus clientes puedan aprender y que les va a servir.
Siempre hazlo ameno, que se entretenga con la lectura, no le metas una chapa que solo entienda si tiene 1 postgrado y 3 másteres en el tema.
Una curiosidad, un cambio de alguna ley, un consejo…, mostrar una estadística, un dato contrastado, con un enlace para que pueda ampliar esa información, …, ya, depende, de lo que estés ofreciendo.
Pero siempre de manera entretenida.
Estos 3 elementos, siempre siempre tienen que tener tus emails.
Con los tres pasos bien hechos vas a, por lo menos, mantener a la gente en tu lista.
Luego, cuando tengan la necesidad, será en ti, en quién primero van a pensar y a quien van a comprar.
Eso es un paso enorme, aunque no te lo creas, es muy difícil de hacer.
Como un día pilles a la persona con el pie cambiado, se da de baja y no lo vuelves a ver.
Cuanto más tiempo se mantenga en tu lista, hay más posibilidades de que te llegue a comprar.
Puede ser que no esté convencido, que dude por lo que sea, que en ese momento no te necesite, pero ten por seguro que si sigue ahí, sabe que puede existir esa posibilidad y no quiere perderte, para que, cuando llegue echar mano de ti.
Si no tiene ningún interés, con irse lo soluciona.
Las personas somos muy perezosonas, reconócelo, y si podemos evitar el perder tiempo buscando algo en montones de webs, ya me dirás que no lo vamos a hacer.
Seguro, yo la primera.
3.- Las 5 ventajas, aquí las tienes
Elijo las 5 que te pueden hacer ver su valor, pero pocas son, sin duda.
#1.-Conseguir la confianza de tu suscriptor
No cabe duda que el contacto frecuente consigue relaciones.
Mostrarte cómo eres, a diario, hace que la otra persona te conozca y se acerque, que se haga de ti la idea que necesita para llegar a trabajar contigo.
No olvides que si hay muchos peces en el mar, muchas más ofertas de lo que ofreces hay en internet.
Tienes que hacerte desear.
No lo consigues con una llamada o un contacto puntual.
Se trata de sembrar para luego recoger.
Conseguir la confianza del otro ya es un éxito.
Por lo difícil que es.
#2.- Muestras a diario lo que haces
Una oportunidad de oro de hablar de tu trabajo cada día, ¿tú sabes la importancia que tiene eso?
Cada día, en cada envío.
Es parecido a salir en la TV, pero solo te va a ver la gente a la que interesas, y que a ti te interesa.
Te has quitado a los que cambian de canal.
Porque los que han entrado, por probar, ya te digo que se acaban yendo.
Es lo mejor, que no pierdan tiempo ni te lo hagan perder.
Si vendes productos, puedes hablar de uno cada día, si ofreces servicios, de los beneficios que se consiguen.
Así día tras día.
Es brutal.
#3.- Consigues mucha información preguntando
Feedback, se llama
Pídelo, es importante, sacas mucha información.
Cuando lo consigues, es el momento en el que logras la conexión con los suscriptores.
Para Google también lo es, un correo que se contesta es un remitente que no lleva directamente a la carpeta de spam.
Da por hecho que es de interés para el destinatario.
Haz preguntas a tu audiencia que, además, te dan mucha información de cómo son y de qué quieren, para luego poder ofrecérselo.
Igual adelantas el momento en que compra, si le muestras justo lo que necesita, porque te lo ha dicho.
Es ir a lo seguro.
#4.- Puede que ahora no, pero consigues clientes a largo plazo
Y clientes convencidos, son ellos los que han acudido a ti.
Tú ya te has mostrado cada día y son ellos los que te van a buscar.
No hay que hacer más.
Saben que estás ahí y qué ofreces.
En cuánto necesiten este servicio te van a recordar o, por lo menos, te van a tener en cuenta.
Es una forma brutal de conseguir estar en la mente de la gente.
#5.-Los lectores se acostumbran a ti
Eso sí, tienes que cumplir lo que prometes al inicio.
No es necesario que sea un envío diario, si ves que no lo vas a poder mantener, define tu estrategia y síguela.
No puedes fallar a tu lector.
Se acostumbran a ti y te van a buscar al abrir su bandeja, de entre todos los que recibe, el tuyo es el que van a leer cada día.
Además, si lo abren solo “por ser tú”, es cuando la importancia del “asunto” está en segundo plano.
Para llegar a este punto necesitas un compromiso con tu lista.
Es una decepción, pensar que vas a recibir algo y que no llegue,
Nunca incumplas lo que dices, no lo hagas, ni con suscriptores ni con nadie.
4.- Consejos para disfrutar de esas ventajas (y de alguna más)
Te dejo unos consejos finales, por si te decides empezar a hacerlo
- No desatiendas tu lista de suscriptores.
- No te olvides de ella.
- No escribas por poner algo, sin ganas, eso se nota.
- Ten continuidad, no empieces con mucha fuerza y te aburras en 4 días.
- Empieza si, de verdad, estás convencido de poder seguir.
- La imagen que dejas atrás, cuando no has cumplido lo que dijiste en el “correo de bienvenida», te va a acompañar mucho tiempo.
- La confianza del lector está perdida y no se recupera.
- Emplea el tiempo que necesites en su redacción.
- Que sea ligero, entretenga y dé información de interés
De verdad, es un arma superimportante para los negocios y que todavía no está del todo establecida.
Es el momento.
Ten claro que los frutos, como con todo lo bueno, tarda en llegar.
¿Cuánto?
Eso va a depender del tiempo que le dediques.
No pretendas, ya al segundo envío, ser “el más popular de la clase”, el quaterback o la jefa de animadoras.
Ellos también han tenido que pasar lo suyo para estar allí.
Como consejo final te doy este:
Si no estás seguro de poder continuar no lo empieces, mejor delega en alguien que sí pueda y que se dedique a ello.
Te ahorra tiempo y te da muchos beneficios sin tú hacer nada.
Espero haberte ayudado, puedes darme tu opinión en esta cajita de aquí abajo.
Me llamo Bea Martín y soy copywriter especialista en email marketing y creación de contenido.